Como recordarte sin
que se me haga un nudo en la garganta
En las gotas de la
tarde, queda un leve aroma el de nuestro
idioma, que cruel nos arranca
De la sutil tela, el dibujo
que nos crea..
Y del universo cae…
Yo aquí así, despertando
ideas como ya sabes
Antes tú, ahora, son mis
manos atadas
Cansadas, trepando a la misma nada…
Aunque, me queda una especie de talento
Descalzado como mis
pies, en este prematuro verano
Cuando se aquieta la
noche, en su ruido somnoliento..
Escampo a las estrellas y ellas traen tu mirada
Mis ojos en tus ojos
y me doy cuenta que nada ha sido en vano…
Cuando te formo completo…
Abierto como el sol, cada vez que despereza sus rayos hasta al día alcanzarle
Ahora son tus manos y tus dedos que se estiran!... hasta completamente…. acariciarme…
María Verónica García
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