Entre el cielo y el
agua
Como cuando el viento
flota
y cabalga
Siénteme
Siénteme, por favor, en presente
Que las mareas de calor, sobre
mi mente,
para ti, vaivenean omniscientes
Prueba
Los néctares
Libados del nimbo
apaciguado, al romperse, El Beso…
Con el sustento más sublime e ileso, ante el
sueño, de regreso…
Extendidas las horas de la noche, nievan lánguidas, sus esmeraldas,
enredadas
Ya, Trepadas…
Y su espuma blanca, ante
el reflejo, deshojada, desarmada
Apacigua mis venas, en proceso…
Por sentirse acaloradas y, que, el más puro embeleso, atrapara…
María Verónica García