jueves, 24 de marzo de 2011

Unida a tu libertad



Inanna!.. Naciente  franja  de estrella
Desde un rayo Sumerio, te hincas a las húmedas estepas de mi tierra
Heme  aquí plantada, como un junco emergiendo  de las aguas
Volando hacia ti,  por  tu secreto,  mis pampas   de horror están plagadas
Un deseo, como  Uruk!...  despojar  el mal que nace de   las guerras
Del amor,  como un retal pegada…
Se extingan,  que solo brille tu sol,  con sus ocho puntas  argentas
Soy de trigo,  tú,  de cielo
Enki, retoza entre tus gasas
Yo a él, mi forastero,   lo aprieto con mi velo.
 Lo endioso  con mi boca
Y lo hendero hasta sus huesos, con mis brazas
 En un   lento avistar,  sobre su cuerpo!...
Vuelo…
 Nutrida,   cuando  toco  con mis pies sus dulces playas
Escapando de la esfera de otro Homero
Al  rosa del Edén,  en un capullo de plata…  


Tu tiempo entre los siglos se abre y un haz titila,  es tu luz,  que a mi andar con un fin alcanza
Termino la guerra!....  un nuevo perfume,  La  vida!...
Las hebras de mis sueños y mis pupilas,  abren las puertas de la alianza…

Inanna y Enki  en el éter respiran!..
Mi forastero y yo, llenando al mismo aire de alabanzas

María Verónica García



 Nro. 916963

No hay comentarios:

Publicar un comentario